Este texto académico está enfocado desde la preparación y concepción del cambio para coadyuvar a la solución de las disímiles dificultades que se pueden presentar en el ámbito del trabajo y de las organizaciones sistémicas, que los futuros trabajadores sociales o trabajadores de manera general pueden enfrentar en los nuevos escenarios laborales en los que se insertarán, y estarán preparados y empoderados como nuevos líderes, gestores de un cambio positivo. Lo más difícil de cambiar en una organización es su cultura, porque la misma es como su modo de vida, los cambios deben estar encaminados a mejorar los procesos y a humanizar las relaciones, a crear vínculos de identidad y de adhesión con la organización, a mejorar la calidad de vida de los trabajadores, a respetar sus derechos y trabajar en un clima laboral que favorezca el desarrollo de las habilidades, para ello los trabajadores sociales actúan como agentes de cambio positivo que oriente y acompañe estos procesos sistémicos y conductuales en las personas que integran las organizaciones para de esta manera propiciar el trabajo organizado con procesos de planificación, interlocución y planificación.