La inmigración y la alimentación del adolescente son dos temas de total actualidad en nuestra sociedad, en ello centraré el ámbito de actuación de este trabajo. España en el siglo XXI, se encuentra dentro de los principales países receptores de inmigración, donde las cifras de extranjeros en los diez últimos años se han duplicado llegando a alcanzar los casi cinco millones de inmigrantes en el año 2011. Esta es una situación que está transformando profundamente la sociedad española, ya que la presencia de población inmigrante también repercute en los hábitos alimenticios del país de recepción. Actualmente la correcta alimentación de los adolescentes españoles está en tela de juicio, por sus incorrectos hábitos alimenticios, los cuales se han modificado, con la llegada de jóvenes inmigrantes puesto que cada persona tiene unas costumbres culinarias propias de su cultura y religión, de ahí a que uno de los problemas al que se enfrentan los inmigrantes a su llegada a España son sus hábitos culinarios, característicos de un país occidental.