Fractura. Quejido. Sangre coagulada. Graznido. Pathos. Piltrafa. Orine. Fango disecado. El cerdo de Haneke. La fealdad del mundo. El agujero presto. En la poesía cubana es hora de aislar un territorio RAP, re-creación de un género oral que reúne calle y desafío, pero que aquí traza líneas de fuga y nuevos puntos de partida. Un territorio que es medida prosodia y es escatología resignificada, lengua en danza, catálogo de residuos, duelo a muerte con los pliegues del lenguaje. "Una piedra me ha dado / en la frente, / quedo a salvo de toda suciedad". La memoria es una máquina de moler. (Michael H. Miranda)