La presente investigación se refiere al potencial de gas natural libre (no asociado) de Venezuela, el cual está llamado a ser el combustible del siglo veintiuno por su bajo impacto ambiental y su alta eficiencia energética. Las correspondientes reservas se ubican entre las primeras del planeta pero en un alto grado no desarrolladas. Otros países como Trinidad y Tobago, Argentina y Argelia poseen reservas mucho menores a las venezolanas, pero una producción mucho mayor. Por ello Venezuela y su empresa petrolera estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) están ante la gran ventana de oportunidades de desarrollar ese enorme potencial gasífero para penetrar mercados que hoy están signados por altos requerimientos ambientales. Estos ya representan un serio desafío para las exportaciones petroleras de PDVSA. Por ello se hace impostergable el desarrollo a gran escala de las exportaciones gasíferas venezolanas. El autor agradece al Dr. Henry Jiménez, Director del Instituto para la Energía, el Ambiente y el Desarrollo (IEAD) la generosidad de haber redactado el Prólogo y a la Diplomática María A. Bravo S. por su aporte en el Epílogo de esta publicación.