En resumen este trabajo demuestra que el imaginario de nación constituye un esquema interpretativo que da inteligibilidad a la idea de nación. Con esta conclusión se desea reafirmar lo que la teoría desarrollada desde perspectivas sociológicas, antropológicas e históricas expresaba en torno al imaginario como categoría para el análisis de la realidad social. Efectivamente se pudo observar con los datos, que el imaginario permite comprender aquellas instituciones sociales que poseen existencia en tanto se manifiestan a través de símbolos, discursos y conductas que la sociedad considera naturales . Por tanto, la idea de nación puede ser abordada y aportar información precisa y válida para comprender determinadas legitimaciones sociales. Si comprendemos entonces su papel en la conformación de la ciudadanía y el papel de la escuela, en su sentido amplio, podría articularse la difusión de discursos, símbolos, relatos e imágenes que permitan la construcción de una idea de nación capaz de convocar voluntades y participación más activa para lograr su transformación como expresión de inclusión, representación y democracia.