La desinfección en las explotaciones de animales representa parte inseparable de todo programa zoohigiénico, pues constituye, dentro de los planes de prevención de enfermedades, uno de los pilares insustituibles. Esto es muy importante, ya que la desinfección no debe verse por sí sola como la solución de todos los problemas infecciosos de las empresas dedicadas a la crianza de animales, sino como una parte integrante de las medidas higiénicas destinadas a mantener saneado el ambiente y de esta forma contribuir al mantenimiento de la salud de los animales.