Considerar el estado de salud de la población humana como un indicador de las condiciones ambientales y al ambiente como determinante causal de la morbilidad y la mortalidad ha generado el desarrollo de diferentes metodologías para medir la relación causa efecto entre el ambiente y la salud. Los indicadores basados en la morbimortalidad humana permiten medir las diferencias en los efectos del ambiente sobre la salud, permiten inferir sobre las condiciones ambientales de los territorios y observar la presencia de efectos provenientes del agua, el aire, las sustancias químicas y la fauna.