Varios autores han identificado a la explotación forestal practicada en la región, fundamentalmente en Quebracho y Algarrobo, y al posterior sobrepastoreo bovino y caprino, como el disturbio y la presión que determinó el cambio de proporción entre estratos al disminuir el arbóreo y herbáceo e incrementarse notablemente la cobertura del arbustivo con consecuencias negativas para la capacidad productiva, tanto forestal como forrajera. Sumado e esto, en los ambientes áridos el factor limitante para el desarrollo de la vegetación es la irregularidad y escasez de las precipitaciones; estas condiciones naturales se ven agravadas por la degradación del suelo que, por pérdida de estructura y erosión, disminuye su capacidad de acumular agua y su disponibilidad para el crecimiento de la vegetación. El área debajo de los árboles constituye verdaderos núcleos de fertilidad, en los cuales se genera una vegetación diferente a la de los espacios abiertos. La introducción de especies forrajeras exóticas es una practica común de mejoramiento de estas condiciones, una de las especies que se adaptó mejor es el Buffel grass.