En este estudio se examina el papel fundamental que ejerce un diseño apropiado en un ambiente especifico, mediante una investigación que incluye entrevistas y búsqueda de información respecto al diálogo que entabla el cerebro con su entorno a lo que se le conoce como Neuro Arquitectura. Se revisan resultados suministrados por Camacol y el observatorio urbano regional acerca del crecimiento demográfico en la Sabana de Occidente y su relación con el sector salud. Con base en la conexión que sostienen, se estudia los tiempos que incurren en procesos de recuperación del paciente en áreas donde no ha habido cambio en el diseño, el color o la luz y se compara con los espacios que han sido sometidos a dichos cambios y los resultados mejoran hasta en un 32% en aspectos como anímico, salud y bienestar. Es propicio utilizar la teoría del color como eje articulador en el desarrollo y planteamiento de estos espacios, la cual permitirá evidenciar con los pacientes el resultado de su estadía y pronta mejoría, mientras manifiestan sus percepciones con esta técnica en cada área.