El capital humano avanzado es el pilar fundamental para desarrollar un sistema nacional de innovación. En su intento por avanzar hacia una economía basada en el conocimiento, el Gobierno de Chile ha financiado millones de dólares en becas para doctorado. Se estima que hacia el 2019, alrededor de 6.000 nuevos investigadores obtendrán el grado académico de doctor en Chile, duplicando el número que hoy presenta. Frente al eventual riesgo de que los nuevos doctorados no encuentren las condiciones para realizar actividades de investigación científica y desarrollo tecnológico en el precario sistema de innovación que Chile, existe el riesgo de que esta inversión pública no se aproveche completamente. ¿Cómo otros países afrontaron este desafío? El presente estudio recopila experiencias internacionales y propone adaptarlas al caso chileno.