La PYME (SMEs) inserta en redes internacionales actúa como instrumento para el desarrollo endógeno en zonas económicamente pobres, mediante la generación de empleo y la vinculación con empresas locales. Esta premisa, décadas atrás, habría encontrado su lugar en el marco de la cooperación para el desarrollo ofrecida hacia América Latina, Asia y África. Debido a la crisis global que asistimos, esta premisa se convierte en importante para cualquier empresa de menor dimensión que se encuentra bajo un escenario económico adverso, dado que los vínculos empresariales son un instrumento importante para adaptarse a los entornos difíciles, obteniendo ventajas que de otra forma pudieran ser irrealizables. Así mismo, viene bien que las instituciones públicas que buscan un nuevo camino hacia el crecimiento económico analicen estos casos atípicos en los que, ante un ambiente económico desfavorable, las empresas de menor dimensión continúan innovando, en paralelo a la generación de valor para la localidad.