Allí radica la actualidad, pasar de una gramática meramente descriptiva, que es útil en cierto sentido, hacia una gramática de la revelación, del hallazgo. Así, los estudiantes podrán discernir cuándo es un sustantivo, o un verbo, es decir, identificar cada categoría gramatical, de acuerdo a sus funciones dentro del discurso, y verificar la confiabilidad de los análisis, para no implicar conjeturas, y ganar en que no existan los malentendidos o embrollos lingüísticos, o sea, atribuirle un significado inexacto, a lo que no lo tiene. Por tanto, la gramática es la ciencia en donde el descubrir sea el pretexto para hallar una realidad más exacta de la posibilidad del funcionamiento de la lengua.