Los sistemas educativos actuales trabajan por la elevación de la calidad de la educación por su gran importancia para el desarrollo de cada nación y de la propia humanidad. En este sentido el maestro primario debe tomar en consideración las características individuales de los alumnos, sus diferentes niveles de desarrollo, diferencias y particularidades para promover en ellos el desarrollo hasta el límite de sus posibilidades, pues no se puede pretender que todos lleguen a un mismo nivel de desarrollo ni que sean perfectos, si ello ocurriera, se estaría eliminando la condición de humanos.