Las bebidas energéticas (BE) son consideradas como bebidas no alcohólicas que contienen principalmente azúcares, acidulantes y cafeína o combinación de otros ingredientes como taurina, guaraná y ginseng u otros extractos vegetales. El consumo de estas bebidas se ha incrementado de manera importante en México entre los jóvenes adultos con la finalidad de disminuir las horas de sueño, potenciar su energía e incrementar el rendimiento académico y deportivo. Entre ellos incluidos los jóvenes universitarios, los cuales desconocen los efectos secundarios adversos que estas bebidas pueden llegar a presentar debido a su consumo. Algunas BE pueden presentar exceso de azucares y sodio. El riesgo viene cuando se consume en exceso estas bebidas. Se encontró relación entre el consumo de bebidas energizantes y conductas de riesgo, principalmente en el consumo de alcohol en hombres y conductas sexuales de riesgo en mujeres.