España y Guinea Ecuatorial, dos países cultural y racialmente muy distintos, pero unidos por la historia y por la lengua española. Este libro se focaliza en el castellano puesto en boca de los guineanos, y analiza los resultados de un encuentro exótico, desde las perspectivas léxicológica y semántica. Las raíces bantúes de los guineanos y el especial estado de plurilingüismo de Guinea Ecuatorial constituyen un terreno fértil para la neología tanto léxica como semántica que se plasman en el español, idioma oficial del país africano.