Analizar teológicamente, a la luz de la teología del Papa Francisco, la familia como un lugar-techo que genera perdón, diálogo, reconciliación y sana las heridas dentro de la familia y el programa de vivienda digna. Los valores de amor, fraternidad, paz, apoyo y comprensión dejan de lado el individualismo que causa muchos conflictos en nuestra sociedad. La invitación es hacer una restauración profunda de estos valores para el beneficio de toda la familia. Pensar en los demás, especialmente en los más débiles, nos permite abandonar ese individualismo y nos invita a mirar al otro de una manera diferente, de manera comunitaria, donde lo más importante es el bien común como un resultado apropiado para cada sociedad.