Con la invasión y colonización del Nuevo Reino de Granada por los Europeos españoles, se inicia una etapa de profundas transformaciones en la cosmovisión, las practicas y el manejo de los bienes de la naturaleza. También se da inicio a un dinámico intercambio de saberes y productos entre el nuevo y el viejo mundo. Se establece un conjunto de nuevas y complejas relaciones entre los grupos humanos con la naturaleza, se crean nuevos lenguajes, concepciones y taxonomías para denominar la exuberante diversidad natural neogranadina. La colonización trae una mentalidad foránea impulsada por nuevas relaciones de poder entre los diversos grupos humanos y en la apropiación de los bienes de la naturaleza. Ante la creciente explotación y extracción de bienes naturales iniciada desde la época colonial,con los que Europa se modernizó, aflora una preocupación por el devenir y la permanencia de la naturaleza como un patrimonio de la humanidad.