La contribución de la industria vitivinícola a la economía española, en términos de empleo y Valor Añadido Bruto (VAB), es de suma relevancia. Sin embargo, dicha actividad no sólo destaca por su peso económico, sino por su valor social, patrimonial y medioambiental. En efecto, la industria vitivinícola española posee un profundo vínculo con la gastronomía nacional, la cultura, el patrimonio, la riqueza paisajística, la imagen proyectada hacia el exterior, así como otros elementos que configuran la identidad del país ibérico. Ante esta realidad, el presente libro pretende mejorar la comprensión integral del significado del cultivo de la vid, la producción y distribución del vino en España, a través de la consideración conjunta de sus implicaciones económicas, sociales, patrimoniales y medioambientales.