En este trabajo se pretende, por un lado, detallar las diferencias en el comportamiento electoral en función del hábitat y, por otro, indagar en las posibles causas de estas. Para ello, se estudia si variables, que han sido recurrentes en los diversos estudios sobre el comportamiento electoral, como la edad, el género, la clase social, el nivel educativo, el sentimiento nacionalista o la ideología pueden dar cuenta de las diferencias observadas. Junto a ellas, también se incluye la población de los municipios como un factor explicativo de la brecha en el comportamiento electoral entre el medio rural y urbano. La constatación de que esta variable, por sí misma, pueda explicar parte de las diferencias observadas entre los distintos hábitats conduce a la búsqueda de las posibles causas de que el tamaño del grupo tenga importancia electoral, así como de su relación con el fenómeno clientelar ampliamente recogido en la bibliografía.