La lectura de El país bajo mi piel, marca los inicios de una posible conexión duradera entre Gioconda Belli y Simone de Beauvoir y es a través de un análisis profundo de las tres primeras obras narrativas de Belli, La Mujer Habitada, Sofía de los Presagios y Waslala, que es posible establecer las bases de esta conexión en donde Belli parecen conversar con Beauvoir, haciendo constantes referencias al Segundo Sexo. Este análisis, junto con el establecimiento de un detallado trasfondo literario femenino en Centro América muestran como Belli construye, a través de sus tres primeras obras, las primeras facetas de una mujer libre, una mujer que en 1949 no era más que un sueño para muchas, pero que a finales del mismo siglo es una realidad que ahora debe luchar por mantener esta valiosa posición.