En el presente trabajo se presenta una propuesta nada tradicional de incorporar acciones positivas y cláusulas con transversalidad de género, en los productos derivados de la negociación colectiva (condiciones generales de trabajo, contratos colectivos de trabajo y contratos ley) en beneficio de los trabajadores y trabajadoras mexicanos, reconociendo de esa forma, el poder creador de derecho que tienen los interlocutores sociales en los procesos de negociación.