Las percepciones de los sujetos que conforman la Policía de la Provincia de Buenos Aires acerca del despliegue temporal de sus actividades laborales constituyen el eje del análisis de este libro donde se propone comprender la estructuración del trabajo policial en la práctica. En La policía no es una fábrica la autora explora las tensiones surgidas de la disposición del tiempo en esta actividad laboral, y que revelan las relaciones de poder que surcan este espacio social determinado. Mediante un enfoque etnográfico se describen prácticas cotidianas de la tarea policial y se exponen insumos fundamentales para abordar las singularidades y/o familiaridades del trabajo policial en diálogo con otras actividades laborales y especialmente la relevancia que cobra la noción del tiempo en la configuración profesional de los policías. El resultado es un complejo abordaje empírico que indaga las tensiones analíticas que definen lo que este trabajo significa en las representaciones y experiencias de sus protagonistas, los hombres y mujeres que integran la institución policial más grande de la Argentina.