Friedrich Schiller escribe entre 1790 y 1796 algunos ensayos sobre estética en los que reflexiona sobre el tipo de placer propio del arte trágico. Sin embargo, no se limita a presentar una reflexión sobre el arte, sino que muestra una relación entre las nociones propias de la estética -lo bello y lo sublime- y otras nociones -la libertad y la idea de humanidad- que parecen tener que ver con un ámbito distinto, mostrando así una preocupación que supera los límites de la estética. Ahora bien, en las Cartas sobre la educación estética del hombre, se hace evidente una preocupación política que se presenta en relación con la estética y con el papel que puede cumplir el arte en la sociedad. Por esta razón, el objetivo de este trabajo es mirar cómo en los textos anteriores a las Cartas se puede ver anunciada esa preocupación política de Schiller, y cómo esta preocupación está planteada en relación con el arte. Así, lo que se pretende encontrar es un concepto de lo político con el propósito de entender cómo se plantea al arte como una perspectiva distinta que al tener en cuenta las distintas posibilidades de ser humanos, nos permite comprendernos como esencialmente políticos.