Este Estudio de Caso es resultado de una serie de inquietudes que desde hace varios años se han venido percibiendo en torno al creciente decremento de públicos en los eventos artísticos: teatro, danza y música, presentados en los distintos espacios culturales de la ciudad capital del estado de Veracruz; que si bien no es privativa de lugar, ya que es recurrente leer y oír comentario en torno a este problema en los diarios nacionales. Los estrenos/reestrenos tomados como ejemplo, si bien tiene un desfase cronológico, no por ello se pierde vigencia, pues el incremento de productos escénicos sigue a la alza como la asistencia a la baja. El estudio parte del principio que toda práctica escénica está constituido por signos escénicos que emplean los creadores y/o ejecutantes. Para la decodificación de estos signos, se incluyen los modelos de Ficher-Lichte, Erika (1983), Ubersfeld, Anne (1996) y Kowzan, Tadeus (1997). Se propone además como opción para la solución de la problemática de asistencia a los espacios culturales, la creación de una Escuela para la formación de públicos, así como el estudio continuo de los hábitos de consumo de los potenciales espectadores.