El problema central que se deriva de la práctica de este tipo de forma productiva, es que pocas veces se reconoce como un tipo dual de economía, donde el productor es propietario y trabajador al mismo tiempo, por lo tanto "es dueño del producto y los excedentes producidos por él", su reproducción presenta un individuo con dualidad de intereses económicos pero que se integra e identifica como trabajador, en cuanto son productores insertados como tales en la economía de transición dentro de una institucionalidad común que propicia que la riqueza creada sea socializada aún en los marcos de la heterogeneidad socioeconómica para lograr finalmente la superación positiva de la misma, mediante la promoción del desarrollo económico y social sostenible y la ruptura de las taras del subdesarrollo con el máximo de igualdad, justicia social y equidad.