La cuestión es relevante porque, aunque el sistema penitenciario se considera preventivo, tiene numerosos defectos, y las perspectivas para quienes están bajo custodia del Estado son algo inciertas. El sistema es ineficaz, por lo que proporcionar condiciones para la resocialización es deber del Estado. No se puede negar que la finalidad de la pena, más concretamente su eficacia, no se corresponde con los deseos de la sociedad, que es salvaguardar la seguridad individual y pública. El delincuente, después de cumplir su pena, difícilmente podrá reincorporarse a la vida social, porque el sistema penitenciario está cada vez más en quiebra, lo que imposibilita el cumplimiento y la aplicación de la Ley 7.210/1984, que garantiza a los presos unas condiciones mínimas de bienestar. Redimir la pena por estudiar no sólo le permite aprender y ampliar sus conocimientos, lo que repercute directamente en la ampliación de sus oportunidades cuando salga de prisión, sino que también representa una forma de que los reclusos amorticen días de su condena. Por lo tanto, es un incentivo y un medio de preparar a estos individuos para que, cuando vuelvan a la sociedad, puedan tomar decisiones y seguir caminos diferentes.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.