La juventud entendida como proceso de transición tiene implícito, en su propio léxico, el paso a otra condición, a otro estatus, al estatus de adulto. Esta premisa está inserta en la propia definición de la palabra transición. Sin embargo, las nuevas condiciones sociales, en las que se tienen que desenvolver los jóvenes de hoy, indican que más bien, esos jóvenes se encuentran encerrados en un proceso transitorio que se prorroga cada vez más y más en el tiempo. No es de extrañar que nos encontremos con jóvenes mayores de 30 años atrapados entre la edad adulta y la juventud. Los conceptos de juventud como sinónimo de transición-proceso-etapa para llegar a la edad adulta, dan paso a otros. Nosotros hemos querido integrar estas situaciones nuevas que viven los jóvenes en nuestro país bajo un nuevo concepto. Para ello hemos desarrollado el concepto de reversibilidad. Concepto que como vamos a ver se ajusta mejor a las nuevas situaciones de transición y no transición en la que se encuentran los jóvenes.