La seguridad en el mundo ha tomado importancia a causa de los problemas intermésticos creados por las interrelaciones de interdependencia entre los Estados, como son: la migración; el crimen trasnacional; lavado de dinero; terrorismos; tráfico de personas; narcotráfico; crimen organizado, etc. La necesidad de la seguridad lleva a los países a crear doctrinas, panópticos e instrumentos para preservarla. Este es el caso de la región de América del Norte, donde se han venido construyendo proyectos con el fin de impulsar una integración institucional, como lo es: el TLCAN plus y el ASPAN y ACUERDO MÉRIDA. Pero, dichos proyectos han tenido como eje articulador a la seguridad más que la prosperidad. Una seguridad que conlleva a la cooperación desigual, como es el caso de la Iniciativa Mérida, entre México y Estados Unidos y que conlleva lógicas de poder y decisiones en materia de política exterior que giran en torno a la seguridad de Estados Unidos, más que a sus socios del TLCAN.