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El mundo está convulsionado. No se trata de una crisis más, sino de una crisis de naturaleza y de cultura, y por el mismo motivo una crisis antropológica de fundamentos y de valores. La incapacidad para procesar la crisis es proverbial, pues ni la población mundial, ni los pensadores, ni los políticos, parecen estar dispuestos a plantar la cara y a tratar de afrontar en profundidad y severamente la realidad sin miedos, como es y no como nos gustaría que fuese. Una rara minoría parece dispuesta y capaz de dimensionar la magnitud de los problemas, comenzando por el improrrogable del ecocidio,…mehr

Produktbeschreibung
El mundo está convulsionado. No se trata de una crisis más, sino de una crisis de naturaleza y de cultura, y por el mismo motivo una crisis antropológica de fundamentos y de valores. La incapacidad para procesar la crisis es proverbial, pues ni la población mundial, ni los pensadores, ni los políticos, parecen estar dispuestos a plantar la cara y a tratar de afrontar en profundidad y severamente la realidad sin miedos, como es y no como nos gustaría que fuese. Una rara minoría parece dispuesta y capaz de dimensionar la magnitud de los problemas, comenzando por el improrrogable del ecocidio, los problemas de disimetría en las relaciones norte-sur que llevan a las tres cuartes partes de la humanidad a pasar hambre, y terminando por la crisis axiológica; en definitiva, una crisis de identidad antropológica recorre la humanidad, la cual parece moverse entre el fatalismo y un vago irrealismo mientras da la espalda a los problema fundamentales. Entregado a cuestiones de estética superficial, parece que el ser humano, en suma, está perdiendo su capacidad de reacción, e incluso su instinto de conservación. Una reflexión para docentes, universitarios y profesionistas cultas y educadores.
Autorenporträt
Carlos Díaz (1944), filósofo personalista comunitario vivo de mayor repercusión mundial; es doctor en filosofía, psicología, derecho y doctor honoris causa en la Universidad Galileo de Guatemala; estudio también filosofía política, movimientos sociales y obreros, pedagogía, teología e historia comparada de las religiones. Fundador Instituto Mounier.