Las actuales condiciones de vulnerabilidad y potencialidad de América Latina, en un escenario incierto que proviene del cambio climático, nos da la oportunidad para generar un espacio de discusión y revisión de paradigmas del desarrollo de nuestros territorios.El presente acercamiento sugiere a la incertidumbre como una oportunidad, observando como problemas de partida, que: A. La falta de reconocimiento del Otro, genera rupturas en las conexiones entre actores, haciendo que las actuaciones sobre el territorio sean fragmentadas y en general, no validen en su totalidad el capital humano y ambiental del topos. B. La observación y medición de las vulnerabilidades desde indicadores individuales, no posibilita crear escenarios de análisis complejo, produciendo con ello miradas superficiales y respuestas simples. C. La participación ciudadana, no cuenta con las herramientas suficientes para actuar de forma proactiva y generar propuestas de cambio resiliente. Presentamos 2 casos que reconocen el valor del análisis de indicadores complejos, y la posibilidad de reformulaciones y cambio de una propuesta de movilidad, desde acciones concertadas entre la academia, la comunidad y el gobierno.