Los niños y adolescentes que sufren problemas de audición se encuentran en alto porcentaje en países de economías desarrolladas; de acuerdo con la OMS .En el Ecuador hay 14.05% de personas con discapacidad auditiva, de las cuales 10% son estudiantes de educación básica, media y bachillerato, de allí la necesidad de establecer mecanismos que apoyen la inclusión en el proceso de identificar y responder a la diversidad de las necesidades de todos los estudiantes a través de la participación en el aprendizaje, las culturas y las comunidades, reduciendo la exclusión en la educación. Esta política involucra cambios y modificaciones en contenidos, estructuras y estrategias, con una visión común que incluye a todos los niño/as del rango de edad apropiado para educar, se plantea la participación de toda la comunidad educativa en el proceso de enseñanza aprendizaje en igualdad de derechos. La lengua de señas no impide que las personas aprendan la lengua oral , e incluso favorece su aprendizaje. Se señala que en la educación el rol del docente debe ser innovador, capaz de usar estrategias metodológicas que promuevan el aprendizaje significativo.