Es de percibir que las prácticas pedagógicas observadas en Instituciones escolares, en muchos casos, están fundamentadas en una acción homogeneizadora, con un currículum monocultural que, muchas veces, ignora y calla la diversidad cultural. Actualmente, debemos reconocer que vivimos un "nuevo" escenario, el que reivindica lo nacional, pero que trasciende esas barreras en relación con lo global. Dentro de este enfoque podemos afirmar, que un abordaje intercultural puede trabajar desde sus diferentes perspectivas: fases folclóricas, en que muestre la influencia de diferentes pueblos en la formación de la cultura; crítica, de desafío a preconceptos, formación de la ciudadanía y cuestiones acerca de la desigualdad social. Además, se permite mostrar la diversidad dentro de la diversidad. La clase de lenguas es un escenario ideal, ya que no es posible trabajar lengua sin trabajar Cultura. Y las Artes constituyen una excelente oportunidad para ello, como potenciadoras de los aprendizajes. Este trabajo se dirige a estudiantes y docentes que deseen aventurarse en la posibilidad de la reflexión crítica de su accionar, así como brinda algunas posibles líneas de abordaje en el aula.