Los quistes mesentéricos son tumoraciones de preferencia benignas poco frecuentes entre las que se encuentran los linfoangiomas. El tres por ciento llega a malignizarse. Estas lesiones pueden ocurrir a cualquier edad pero un tercio de ellos se presentan en edad pediátrica. Su presentación clínica es variable, pero generalmente el 50% de los casos se presenta con dolor abdominal agudo y el 40% de los caso como un hallazgo incidental. Presentamos el caso de un paciente de 3 años y 3 meses que ingresa al servicio de urgencias con cuadro clínico de 4 días de evolución caracterizado por alza térmica no cuantificada, deposiciones diarreicas en número de 3 cada 24 horas y signos de deshidratación moderada. A la exploración física se palpa abdomen globuloso y distendido, poco depresible, los exámenes de laboratorio indican anemia e hipoalbuminemia, los exámenes, la tomografía de contrate indica un quiste de mesenterio. El tratamiento fue la excéresis del quiste y el diagnóstico anatomopatológico fue de linfoangiomas quístico mesentérico. Se envía dieta hiperprotéica posterior a la operación con una molécula calórica de 1.400 kcal.