La caracterización de perfiles de estilos de aprendizaje en la universidad contemporánea constituye una necesidad si reconocemos que los estudiantes poseen diferencias culturales y modos de aprender únicos e irrepetibles, lo que nos conduce a asumir una práctica pedagógica que propicie la reflexión para un cambio didáctico.La intención de este libro ha sido valorar la necesidad de que los docentes favorezcan la atención personalizada de sus estudiantes. En este proceso se parte de la concepción histórico-cultural de L. S. Vigotski y se delimitan tres dimensiones: afectiva, cognitiva y metacognitiva. Esta propuesta es una alternativa para la búsqueda de nuevas formas de enseñar a aprender y aprender a enseñar. Sus autores continuarán perfeccionando este proceso tan complejo y diverso a partir de su quehacer cotidiano en las aulas universitarias.