Para el año 1968 nace un Programa Internacional de Monitorización para la Reacciones Adversas Medicamentosas, iniciándose en los Estados Unidos con el propósito de desarrollar un sistema que pudiera aplicarse internacionalmente y detectara y notificara los efectos adversos desconocidos o poco conocidos de los medicamentos. Nuestra responsabilidad nos dirige a crear un Sistema de Farmacovigilancia que suplementariamente permita aumentar la calidad de vida y a su vez que acceda a establecer un Manual de procesos de normalización que viabilice la detección, valoración, evaluación y estudio de sospechas de reacciones adversas a medicamentos identificadas en el proceso activo de dispensación, tratamiento y prescripción, facultando la posibilidad de cuantificar, describir y evaluar las Reacciones Adversas. Este Manual es la respuesta a una estimulante necesidad de promover el uso racional de los medicamentos teniendo en cuenta como basamento elementos específicos de Farmacoepidemiología