Los términos mente y cultura, aunque nos son familiares y solemos pronunciarlas con relativa frecuencia, aparecen, sin embargo, escasamente juntas en los discursos académicos o en la literatura especializada. Su manejo por separado, en cambio, no sólo es abundante sino altamente delimitado, llegando a constituir cotos casi exclusivos, la psicología, para el caso de la mente, y la antropología, para la cultura. Por un mero afán de conciliación, sería sencillo proponer que ambas disciplinas se tendieran la mano para realizar un trabajo conjunto, al menos en lo que respecta a estos dos temas seminales. Desafortunadamente, sin embargo, dicha labor mancomunada es mucho más complicada de lo que a primera vista pudiera parecer. De este modo, el autor inicia su obra, Mente y cultura. La mediación del significado donde aborda, precisamente, esta importante y polémica temática. A lo largo de un fascinante recorrido por las disciplinas humanas y la filosofía hermenéutica, el autor sostiene que el estudio del significado es una temática vinculante que permitiría conformar una perspectiva más integral de la cultura y de la mente.