Cuba es un gran mosaico natural, rico en su naturaleza, la de mayor exuberancia y biodiversidad del Caribe con grandes potencialidades para la práctica del ecoturismo. La Isla de la Juventud no está ajena a este fenómeno, presentando también grandes potencialidades para el uso de la recreación en sus espacios naturales, con muchas especies de la flora y fauna endémicas como: la Cotorra y Grulla cubana, y la Palma Barrigona; además de hermosos paisajes únicos en el mundo; una historia, cultura y folclor llenos de leyendas de corsarios y piratas que asolaron muestra isla en siglos pasados; de pictografías aborígenes que denotan la presencia de los primeros pobladores pineros y una población actual con gran valor humano. Pero también corre el riesgo de destruir sus ecosistemas si no son usados con un profundo carácter sostenible. El presente trabajo se ha estructurado valorando todo lo antes expuesto, al proponer una metodología para el uso del ecoturismo como un nuevo tipo de oferta recreativa ecoturística, para solucionar la problemática del uso intensivo de las áreas silvestres a través de ofertas recreativas turísticas que son insostenible.