Después de más de un período de conflictos militares, Centroamérica ha pasado a una etapa de transiciones a la democracia. Panamá pasó en 1994 a disolver sus fuerzas militares uniéndose así a Costa Rica como estados sin ejércitos. Haití, también disuelve su aparato militar. Actores importantes mantienen una postura de desmilitarización a fin de dedicar recursos a la inversión en seguridad social y desarrollo. Un punto alto de expresión fue el 15 de Diciembre de 1995, cuando se firma por los Jefes de Estado de cada país un Tratado denominado de Seguridad Democrática de Centroamérica. Se suscribe pero posteriormente, el parlamento costarricense y el panameño plantean reservas en todos los aspectos relacionados con personal militar, balance de fuerzas, es decir con cuestiones de compra de armamento. Más recientemente altos funcionarios públicos han expresado que un elemento que impide la integración centroamericana es la militarización. Se es enfático al señalar que la manera de acelerar el proceso de integración social, económica, cultural y política regional sería mediante la desmilitarización.