En Chile, la mediación como proceso de gestión de conflictos en temas de familia, se encuentra implementada a nivel país hace una década, bajo la responsabilidad del Estado, siendo adecuado avanzar en una mirada de calidad del servicio. Por ello, se hace necesario evidenciar desde los operadores del sistema, es decir los y las mediadores, que modelos y herramientas profesionales son utilizadas con éxito en la realidad social y familiar chilena, de modo de identificar desde la práctica profesional, las particularidades que alcanzan en su implementación y así las tareas que demanda en su actual y futuro funcionamiento, desde los niveles operativos hasta la formación de nuevos mediadores.