La educación, a través de la historia, ha sido considerada como el recurso más idóneo y el eje rector de todo desarrollo y renovación social. Mediante el proceso educativo se transmiten los valores fundamentales y la preservación de la identidad cultural y ciudadana; es la base de la formación y preparación de los recursos humanos necesarios. La escuela se convierte, así, en el lugar para la adquisición y difusión de los conocimientos relevantes y el medio para la multiplicación de las capacidades productivas. Es por esto que la Educación Física en las primeras etapas es la base para el desarrollo de la personalidad, por lo que su función consiste no solo en mejorar la condición física del niño o niña, sino de mejorar sus habilidades motrices básicas que es el objetivo principal de los profesores de Educación Física, además de crear hábitos de conducta y valores. Este libro demuestra cómo a través del movimiento y los sentidos el niño y la niña construye el conocimiento.