La motricidad gruesa es una área fundamental en la educación física, ya que esta se encarga de controlar a los grandes grupos musculares y por ende a los grandes movimientos como correr, saltar, lanzar, etc., habilidades que son la base de todas actividad física y también de las posteriores habilidades deportivas. Al ser el pilar de todos los movimientos, la motricidad gruesa debe ser estimulada y controlada en los niños desde pequeños, tal como se controla el avance en lenguaje, matemáticas, salud o cualquier otra área que forme parte del desarrollo integral del niño.