La comunicación se ha constituido en una referencia obligada para la ciencia social. Su importancia estriba en que cada vez es más alta su incidencia en los procesos sociales contemporáneos. Se le podría adjudicar dicha omnipresencia al aceleramiento económico que, precisamente, impulsa la globalización. A mitad del siglo pasado se debatió con acritud la influencia que podrían tener los mass media. Sin embargo, la mirada se ha complejizado en torno a los epifenómenos comunicativos que no sólo ni exclusivamente se remiten a la relación causa y efecto. Hoy día la sociología y la antropología aportan puntos de vista interesantes para comprender la hegemonía mediática. El libro analiza algunas líneas sobre la representación de la identidad de las minorías en el Nuevo Cine Mexicano, como sedimento rutinario de esa paradójica red que se articula entre los medios y los grupos hegemónicos a través de un imaginario colectivo que prácticamente se convierte en un espacio en donde interactúala condición multicultural.