El Trabajo Social y la Musicoterapia son dos áreas del conocimiento que busca lograr el bienestar del individuo o grupo a tratar. El presente libro establece la relación entre el Trabajo Social y la Musicoterapia, como alternativa para el tratamiento de personas con trastornos depresivos. Demostrando que el Trabajo Social y la Musicoterapia se complementan formando un dúo terapéutico eficaz. La música tiene un efecto neuroprotector que estaría mediado por el aumento de neurotransmisores, lo que permite una mayor viabilidad neuronal; esto podría explicar los efectos beneficiosos en enfermedades psiquiátricas y neurológicas crónicas, como demencias, enfermedad de Parkinson y trastornos afectivos. En este escenario, el Trabajador Social (en el equipo terapéutico) cumple un rol importante, ya que a través de sus conocimientos indaga sobre la vida social y familiar del paciente para su diagnóstico y terapia; y luego su integración a la sociedad; es decir, el Trabajador Social es un terapeuta social ya que su meta final es lograr el bienestar del individuo, el grupo y la comunidad, a través de estrategias como: los modelos psicosocial y psicoterapéutico.