El presente libro analiza la postura que Octavio Paz asumió frente al proceso de la modernidad occidental. La tesis que sostiene en el interior de sus páginas es que el Nobel mexicano mantuvo una visión compleja y crítica en torno de ese proceso: fue, a un mismo tiempo, un intelectual moderno antimoderno. Pienso que no hay otra manera de entender al autor de Los Hijos del Limo cuando se le estudia desde la crítica cultural. El poeta mexicano siempre estuvo en constante tensión con el fenómeno de lo moderno y asumió este reto a través de las ambigüedades que esta misma circunstancia implica. Me parece que en eso reside la ambivalencia en la obra de Octavio Paz: como Marx, como Nietzsche, como Baudelaire, el poeta mexicano es al unísono un "enemigo y un entusiasta" de la modernidad.