Dios ha diseñado tu vida para tener impacto en otros - tal cómo Jesús lo hizo - usando las circunstancias cotidianas como un trampolín. Y si has evitado involucrarte en el trabajo del Reino de Dios porque crees que no tienes nada significativo para contribuir, piénsalo de nuevo. Usando historias convincentes de la vida real y una lente contemporánea sobre la Escritura, Dwight Robertson muestra como el emocionante plan de Dios para edificar su reino sucede - literalmente - en personas ordinarias, a través de actos tan simples como compartir el alimento o relacionarse con gente desconocida en el camino - tal como lo hizo Jesús. Dios llama y equipa a gente promedio y ordinaria para impacto creativo - tan distintos y únicos como cada uno de esos individuos, a través de hogares, vocaciones, y hobbies. ¡El pueblo de Dios está esparcido por todo lugar! Imagina lo que podría suceder si los cristianos hasta hoy inactivos se reportaran listos para la acción cada día. El Plan A de Dios alienta a todos a seguir el modelo de Jesús: Ministrar de cerca, una vida a la vez, fuera de los muros de los templos... ¡todos los días, en todo lugar! Sí, Dios tiene un plan para alcanzar el mundo, y es muy simple. Eres tú. Para Dios Tü Eres El Plan A... y no hay Plan B.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.
Hinweis: Dieser Artikel kann nur an eine deutsche Lieferadresse ausgeliefert werden.