Los católicos tenemos dos encomiendas: vivir el evangelio de Cristo y predicarlo. Esta vivencia tiene su culmen en la celebración de la Eucaristía, es decir, en la Misa. En este libro podremos conocer las partes de que se compone la celebración del sacramento que es principio, fin y fruto de cada actividad humana. Se hace énfasis en las actividades que les toca realizar a los integrantes de los ministerios litúrgicos; se explica el porqué de los signos -tan llenos de ellos en la Misa, para que conociéndolos mejor, los vivamos más participativamente.