Para las contribuciones creativas a realidades concretas y adaptables a la sociedad a través de la labor colectiva del ser humano se deben penetrar los fenómenos complejos y problemáticos con herramientas de un inexorable pensamiento crítico que determine estándares intelectuales de claridad, exactitud, precisión, relevancia, profundidad, amplitud y lógica, y que se encuentre dentro de una malla de actitudes interesadas en el bienestar social. La pedagogía del diseño en el ámbito de la educación superior dentro de la sociedad colombiana contribuye a la estimación de parámetros de estructuración cognitiva y formativa esta vez involucradas en los procesos de desarrollo del ser humano, como lo son las interacciones significativas entre el ser y el mundo, que permiten validar las rutas de acción en el análisis y resolución de problemas en diseño desde conceptos débilmente estructurados y algunas veces desde fenómenos plenamente cavilados, donde se efectúan procesos mentales de configuración, modificación y reorganización de representaciones desarrollados para el diseño, para que los aprendices puedan formular y proyectar alternativas constructivas cada vez más pertinentes al contexto.