Pestes, epidemias y pandemias son enfermedades muy contagiosas que causan gran mortandad; los que sobreviven pueden adolecer irreversiblemente de un conjunto variopinto de discapacidades. Estas enfermedades son verdaderas calamidades que ocasionan desgracias e infortunios a muchas personas desencadenando debacles sanitarias, sociales, económicas, psicológicas para las personas, los países y el mundo en general. Las pestes, las epidemias, las pandemias, las catástrofes naturales, las hambrunas, las guerras han matado a demasiada gente a lo largo de la historia. La fragilidad y la vulnerabilidad de la persona humana está demostrada categóricamente que debió y deberá vivir en permanente incertidumbre soportando y resistiendo zozobras reiteradas y presumir siempre por un futuro esperanzador.