Existe un amplio arsenal terapéutico de diuréticos sintéticos que responden a diferentes mecanismos de acción, pero a pesar de ello, la población cubana utiliza con este fin un número considerable de decocciones e infusiones de plantas medicinales, cuyo uso se han transmitido de generación en generación. El libro expone los resultados de una investigación realizada en la Unidad de Toxicología Experimental de Villa clara, que tuvo como objetivo la comprobación experimental de la actividad diurética de 16 plantas de uso común en la población. Como modelos biológicos se utilizó ratas albinas de las líneas: Sprague Dawley (S/D) y Wistar, con un peso comprendido entre 180-220g. Los resultados obtenidos demostraron que la actividad diurética de la Persea americana Mill, Cassia alata L, Carica papaya L, Costus cylindricus Jacq, y la Bidens pilosa fueron las de mayores actividad diurética. Estas plantas no presentaron signos de toxicidad aguda.