Los reclamos de las Primulaceae para atraer a los insectos diurnos son: el color y la forma de la corola de sus flores y el aroma que desprenden, sobre todo para los nocturnos (polillas) (Gaskett et al., 2005). Las recompensas que obtienen son el néctar y/o polen. Sólo ofrecen polen a los insectos visitantes las especies de los géneros: Anagallis, Centunculus, Lysimachia y Samolus. Y néctar y polen: Androsace, Coris, Primula y Soldanella.